miércoles, 18 de febrero de 2009

Una historia para pensar...


Nos convencemos a nosotros mismos de que la vida será mejor después...

Después de terminar la carrera, después de conseguir trabajo, después de casarnos, después de tener un hijo, y entonces después de tener otro.

Luego nos sentimos frustrados porque nuestros hijos no son lo suficientemente grandes, y pensamos que seremos más felices cuando crezcan y dejen de ser niños, después nos desesperamos porque son

adolescentes, difíciles de tratar. Pensamos: seremos más felices cuando salgan de esa etapa.

Luego decidimos que nuestra vida será completa cuando a nuestro esposo o esposa le vaya mejor, cuando tengamos un mejor coche, cuando nos podamos ir de vacaciones, cuando consigamos el ascenso, cuando
nos retiremos.


La verdad es que

NO HAY MEJOR MOMENTO PARA SER FELIZQUE AHORA MISMO.
Si no es ahora, ¿cuándo? La vida siepre estará llena de “luegos”, de retos. Es mejor admitirlo y decidir ser felices ahora de todas formas...
No hay la felicidad es el camino
y es AHORA
GUARDA CADA MOMENTO QUE VIVES, y guárdalo más
porque lo compartiste con alguien especial;

tan especial que lo llevas en tu corazón

Recuerda que:

EL TIEMPO NO ESPERA POR NADIE.

Así que deja de esperar hasta que termines la Universidad, hasta que te enamores, hasta que encuentres trabajo, hasta que te cases, hasta que tengas hijos, hasta que se vayan de casa, hasta que te divorcies, hasta que pierdas esos diez kilos, hasta el viernes por la noche o hasta el domingo por la mañana; hasta la primavera, el verano, el otoño o el invierno, o hasta que te mueras, para decidir que no hay mejor momento que justamente.

SER FELIZ...

LA FELICIDAD ES UN TRAYECTO,

NO UN DESTINO.

TRABAJA COMO SI NO NECESITARAS DINERO,
AMA COMO SI NUNCA TE HUBIERAN HERIDO,
Y BAILA COMO SI NADIE TE ESTUVIERA VIENDO.

LA FELICIDAD ESTA EN LAS COSAS PEQUEÑAS DE LA VIDA,

SE FELIZ UN INSTANTE, Y ESE INSTANTE SERA TU VIDA.

VIVE EL PRESENTE FELIZ, ENTONCES; Y SOLO ENTONCES,

SERAS FELIZ TODO EL RESTO DE TU VIDA.

Al leer esto me dí cuenta de lo verdaderamente importante en la vida... lo más importante no es llegar a ninguna meta... lo más importante no es conseguir estar delgadas...ser unas princesas...porque mientras estas en tu cuento de hadas... la vida pasa...tus hermanos, primos, hijos, sobrinos...crecen, tus amigos hacen sus vida...se te van momentos de diversion, fiestas, risas, excursiones, comidas, barbacoas etc la vida pasa...y solo tenemos una... debemos apreciar las cosas pequeñas y disfrutar del momento, disfrutar de todo lo que tenemos a nuestro al rededor, xk si te encierras en ti, en ser una princesita, en conseguir la perfección...serás la princesa más perfecta del cementerio...y no si no reaccionas a tiempo... no habrá amigos...familia...compañeros de trabajo...que lloren tu pérdida...

Es duro pero es así, disfruta de la vida...sin tentar dia dia a la muerte...porque un día...puede que lo consigas.


martes, 3 de febrero de 2009

Princesitas.............


Bueno... hago un llamamiento a todas las PRINCESITAS... un cuento de hadas...aquí teneis nuestro cuento:


La princesa de cristal: fábula de Ana y Mía.

Escrito por Iván el 16 de Junio, 2008

-Desearía audiencia con la princesa de cristal -solicitó el príncipe cortésmente-.
-¿El motivo de su visita? -preguntó el lacayo real-.
-Organizar un banquete para ahondar en la confraternización de nuestros reinos.
-Me temo que no va a poder ser, alteza. La princesa Ana detesta los banquetes, y la comida en general. Lamento tener que pedirle disculpas en su nombre.
El príncipe abandonó el palacio pero, perseverante como era, volvió al día siguiente habiendo elaborado una nueva excusa.
-¿Qué desea, alteza? -preguntó el lacayo-.
-Querría reunirme con la princesa de cristal por motivos comerciales. Mi reino importa exquisitos manjares de los cuales me gustaría regalar a su alteza, la princesa Ana, una pequeña muestra como signo de concordia.
-Siento tener que rechazar su ofrecimiento de nuevo pero la princesa Ana apenas se alimenta más que de agua. Cualquier otro alimento le causa una extraña indigestión.
-¿La ha visto algún médico?
-Su alteza manifiesta que se encuentra perfectamente siendo sus males exclusivamente pasajeros. Aunque he de confesarle que cada vez la veo más desmejorada.
-¿Y no podría concederme audiencia?
-Me temo que no. La princesa de cristal desea estar sola. Quizá otro día.
El príncipe volvió a marchar del palacio y una vez más volvió al día siguiente, aunque desprovisto de mentiras.
-¿Quiere ver a la princesa Ana? -preguntó el lacayo real con gesto compungido-.
-Así es -respondió el príncipe-. Pero esta vez no voy a mentirle. Estoy enamorado de la princesa de cristal desde que la vi en las fiestas de su decimo octavo cumpleaños que organizó su madre, la reina Mia, antes de su amargo fallecimiento por inanición.
-Lamento decirle que la princesa Ana ha seguido los pasos de su madre, la reina Mia -dijo el lacayo sin poder esconder las lágrimas-. Ha fallecido esta mañana en su lecho.
-¿¡Fallecido!? -exclamó el príncipe consternado-. ¡No puede ser!
-Me temo que sí. Al final consiguió lo que perseguía: no volver a probar jamás un bocado.


Si has llegado a esta entrada buscando consejos sobre dejar de comer, vomitar sin dejar de comer, como vomitar o ayuda para vomitar, y esta fábula no te ha hecho cuestionarte tu manera de pensar.



Podría seguir pero creo que este es uno de los momentos en que sobran las palabras no creeis??